Con más de 34 toneladas  de peso y  3 metros de ancho, las nuevas perforadoras Pantera están hechas para aguantar. Se basan en un diseño modular con versiones DTH y TH para tiros de tronadura, precorte y desarrollo de minas en el segmento de 4-8 pulgadas.

“Cuando desarrollamos las especificaciones, identificamos tres grandes grupos de interés: las empresas mineras, los operadores y el personal de mantenimiento”, dice Jan Petzold, vicepresidente, Equipos de Perforación de Producción para la minería de superficie y subterránea de Sandvik. “Todo lo que hicimos durante el proceso de diseño fue orientado en función de sus necesidades”.

La gama debía combinar productividad, seguridad, ergonomía, sostenibilidad y automatización. Una combinación nada fácil.

“Queríamos una máquina específica para la minería y las necesidades futuras del sector”, dice Petzold. La gama Pantera está diseñada específicamente para el control de paredes, desarrollo de canteras y perforación de explotación en minas de rajo abierto.  Con un diseñador industrial en el equipo de desarrollo, las perforadoras aportan además un toque de estilo a cualquier flota de máquinas mineras.

Las perforadoras Pantera se ofrecen en versiones DTH o TH; la versión DTH perfora tiros de tronadura con diámetros de 115-203 milímetros hasta una profundidad de 45 metros. La Pantera TH produce tiros de tronadura con diámetros de 152-178 milímetros hasta una profundidad de 36 metros.

Se ha prestado especial atención al tiempo de servicio, lo que explica su diseño robusto, sus componentes confiables y la distribución del compartimiento del motor. Puertas en el interior y exterior aseguran a los técnicos de mantenimiento un acceso rápido y fácil a los puntos de servicio. Con una altura de techo de 1,8 metros, hay espacio para inspeccionar cómodamente el motor y los sistemas hidráulico y  neumático. En operación, todo queda protegido por grandes cubiertas.

Ofrecen mayor productividad gracias a un nuevo módulo de avance, con un depósito lineal para cinco barras de perforación, más largas que en los modelos con  sistemas de carrusel.

“Perfora más horas antes de tener que invertir tiempo en el cambio de barra”, dice Petzold.

Seguridad y ergonomía van de la mano. Un ejemplo es la cabina del operador. Una capota rígida integrada a la carrocería constituye la estructura de protección contra vuelcos y la caída de objetos (ROPS y FOPS). Está homologada para soportar el peso de la máquina y de los objetos que caen. “Quiere decir que ya no tenemos que probar la cabina y podemos usar componentes y materiales nuevos”, dice Markus Reinikka, jefe de proyecto. “Las cabinas generalmente son de acero pero nosotros hemos diseñado una estructura de aluminio y otros materiales”.

La cabina es mucho más espaciosa que lo habitual. De hecho, un operador y un instructor caben sin problemas, y hasta hay lugar para un segundo aprendiz si fuera necesario. El nuevo material de la cabina absorbe mejor que el acero las vibraciones y el ruido, y ofrece un aislamiento mejor contra  temperaturas altas y bajas. Una interfaz de operación ergonómica y un sistema de apoyo de la perforadora aportan a la productividad.

Ambas versiones (DTH y TH) de la Pantera son impulsadas por un motor de 399 kW de bajo consumo que cumple las últimas normativas en materia de emisiones. Para ambos métodos de perforación, se utiliza como base la misma plataforma pero diferentes tipos de unidad de potencia. La Pantera TH está equipada con un martillo hidráulico de 45 kW, un método de perforación con menos pérdida de energía que la perforación DTH. La percusión procede de un martillo neumático justo detrás de la broca. Se propulsa con aire comprimido a una presión máxima de 35 bar.

Aunque la perforación DTH se caracteriza por pérdidas de energía intrínsecas superiores a la TH, la Pantera DTH se entrega con un nuevo paquete de sostenibilidad que permite ahorrar hasta un 20 por ciento en combustible. El resultado es una reducción notable de costos y emisiones, sobre todo en minería continua.

Con la gama Pantera, Sandvik lleva la capacitación del operador a un nuevo nivel. Además de mejorar la cabina, la empresa ha desarrollado un simulador.

“Se puede capacitar a los operadores antes de que suban a un equipo de perforación”, dice Petzold. “Aumenta la seguridad, reduce el riesgo de daños y ayuda a mejorar el rendimiento”.

También sirve para capacitar a los instructores, así como para actualizar a los operadores que vuelven de un permiso y necesiten una puesta a punto.

El operador del equipo de perforación cuenta con un alto grado de automatización, que incluye la automatización de barrenos individuales, la alineación y el posicionamiento automático del avance. También incluye un sistema de monitoreo del status y un sistema de apoyo con navegación opcional por GPS. Las perforadoras Pantera pueden configurarse para la teleoperación.

Todas las versiones comparten la misma plataforma, sistema de mando e infraestructura de automatización, para controlar mejor los costos de capacitación, mantenimiento y propiedad.

Texto: Åke R Malm/Ilustración: Tata Trikoz