De arriba a abajo

De arriba a abajo

A medida que baja la ley del mineral y el transporte por camión se hace inviable, la mina de cobre a rajo abierto más grande del mundo se convierte en mina subterránea. La mina de Chuquicamata, en explotación desde 1915, dejará de ser rentable a fines de esta década.

En un intento de evitar su cierre, la empresa estatal Codelco ya ha invertido casi 4.000 millones de dólares para transformarla en la mayor mina subterránea del mundo. Se excavarán más de 1.000 kilómetros de túneles bajo la cantera y se proyecta sustituir los camiones de volteo con un sistema de Trituración y Transporte en el Rajo (IPCC). Los camiones actualmente recorren más de 10 kilómetros para buscar mineral de ley inferior desde el fondo de la segunda mina a rajo abierto más profunda del mundo.

Codelco cree que los depósitos por extraer de la mina equivalen a más de la mitad de todo el cobre extraído durante el último siglo. La empresa cree que una mina subterránea en Chuquicamata podría producir más de 300.000 toneladas de cobre al año durante otros 50 años. La mina a rajo abierto produjo 443.000 toneladas en 2011.

Sandvik Mining