El desafío energético

informe especial Eficiencia energética El costo energético sube y es evidente que la eficiencia energética es vital para la competitividad en la minería. Nuevos datos muestran que las empresas pueden reducir su consumo de energía hasta un 15 %.

En Johannesburgo, Sudáfrica, Stan Pillay habla de sus desafíos como director de cambio climático y energético de Anglo American, una de las mayores empresas mineras del mundo. “Nos afectan los precios cada vez más altos que pagamos por la energía, la posibilidad de que se creen impuestos sobre las emisiones de CO2 en algunas regiones donde operamos y, además, los problemas potenciales en la seguridad del suministro de energía”.

Pagar cada vez más por la energía no es un problema sólo en Sudáfrica. En todo el mundo, las empresas mineras enfrentan alzas en los precios del petróleo y la electricidad, posibles impuestos sobre las emisiones, una mayor competencia por los recursos energéticos así como leyes de cabeza y relaciones estéril/mineral más desfavorables. La consultora McKinsey trabajó con Sandvik para investigar los costos energéticos en la minería y calcula que estos costos y los de emisiones de CO2 en las operaciones mineras podría subir desde el 15-20 por ciento actual hasta el 50 por ciento en los próximos 10-15 años, una cifra alarmante para la cuarta industria global más intensiva en energía.

La crisis económica no ha hecho sino intensificar las presiones sobre las empresas. En 2010, PricewaterhouseCoopers publicó su séptimo informe anual sobre las tendencias en la minería, basado en una encuesta de las 40 empresas mineras más importantes del mundo. “Las presiones sobre los márgenes y los flujos de tesorería han puesto de relieve la necesidad de reducir los costos energéticos”, concluyó. “En este marco, la innovación tecnológica es fundamental”. En otras palabras, los costos energéticos inciden directamente en la rentabilidad de las empresas. Para mantener la competitividad, hay que buscar nuevas fuentes de eficiencia energética.
Para ayudar a las empresas mineras, Sandvik ha puesto en marcha un estudio ambicioso para identificar formas de ahorrar energía y reducir las emisiones de CO2, incluyendo un análisis de las minas explotadas por 10 de las 15 empresas mineras más importantes del mundo. Este estudio ha permitido identificar oportunidades de ahorro energético que van desde cambios operativos relativamente menores como apagar los transportadores durante las voladuras, hasta cambios de mayor envergadura a nivel de sistemas, como la trituración en el rajo.

Cómo mantenerseen la primera línea

  • Sandvik trabaja con 10 de las 15 empresas mineras más importantes para buscar oportunidades de ahorro energético.
  • Se comparten los resultados de los estudios y se debate el futuro de las técnicas de minería en una cumbre organizada por Sandvik.

“Es parte de la estrategia que está desarrollando Sandvik. Nos estamos posicionando con vistas al futuro de la minería y los cambios fundamentales que deben producirse tanto en términos de procesos como de equipos”, dice Andrew Philpott, que participa de los estudios de eficiencia energética de Sandvik. “Queremos dar soluciones que permitan a nuestros clientes responder a las presiones económicas y legislativas”, dice Philpott.
El estudio ya ha identificado oportunidades de ahorro. Sólo el 5-10 por ciento de la energía utilizada en la minería se relaciona directamente con los componentes que añaden valor, es decir, la extracción, transporte y procesamiento de mineral. El resto se consume en sistemas auxiliares o en la extracción y procesamiento de roca sin valor. Se desperdicia una enorme cantidad de energía y las empresas deben encontrar formas de aprovecharla mejor. “Hay dos maneras de enfocar la eficiencia energética”, dice Paul Isotalo, otro participante de los estudios de eficiencia energética de Sandvik. “Se puede plantear el tema como un desafío, un problema a resolver. O se puede ver la nueva situación como una oportunidad. Y ése es el enfoque que hemos elegido”.

uno de los estudios de Sandvik se centró en la precisión de la perforación para ahorrar energía. Para perforar con precisión, es necesario reducir al mínimo la desviación en el agujero y alinear cuidadosamente el avance de la barrena a través de mallas de perforación planificadas. Además de la eficiencia energética de las propias barrenas, los equipos de perforación TH de Sandvik cuentan con la última tecnología para el posicionamiento tridimensional en el agujero y la alineación automática del avance mediante GPS. Esto hace posible voladuras controladas, que producen menos rocas sobredimensionadas y un volumen menor o mayor de finos según sea necesario. Así se logra una reducción sustancial del consumo de combustible por equipo.

Aunque la perforación represente una parte relativamente pequeña del consumo, se demostró que decisiones y equipos adecuados durante la fase de perforación conducen a beneficios sustanciales en fases posteriores del proceso de extracción. En otras palabras, si bien es importante la eficiencia en la perforación, mucho más importante es la precisión.
Sin embargo, para controlar los crecientes costos energéticos, hay que innovar en el proceso global y la planificación. “Los productos pueden ayudar pero por sí solos no aportarán los cambios fundamentales necesarios para dar respuesta a los cambios energéticos y climáticos”, dice Philpott.

Es evidente que la eficiencia energética no se conseguirá mediante una sola solución sino con nuevas formas de pensar en todas las fases de la minería y la planificación. En cierto modo, el desafío es concebir la mina del futuro. Es una tarea difícil pero ofrece oportunidades importantes.

Stan Pillay, de Anglo American, comparte esta visión: “Cuando proyectamos la vida útil de una mina, la previsión a cinco años o la planificación mensual de las secciones de la mina, queremos que cada mina sepa sus objetivos energéticos para ese marco temporal. El objetivo es integrar la energía y las emisiones de CO2 en la planificación a corto, medio y largo plazo”. Gracias al estudio de Sandvik y la colaboración entre empresas en el intercambio de conocimientos, ese objetivo pronto puede estar a nuestro alcance.
David Shamy