Fiabilidad andaluza

Las minas de Riotinto en el suroeste de España son algunas de las más antiguas del mundo. Esta zona del norte de Andalucía forma parte del cinturón ibérico de pirita de 350 millones de años de antigüedad y 250 kilómetros de largo, que se extiende desde el oeste de Portugal hasta Sevilla, España. Ha sido una importante fuente de cobre en Europa, tanto en la Antigüedad como en la era actual.

Hace cinco mil años, los pueblos indígenas ya extraían cobre de afloramientos y yacimientos poco profundos. Se cree que los tartesios extraían cobre y plata aquí durante la Edad de Bronce (2.500 a 1.000 AC). Más tarde, la zona fue conquistada por los romanos, que extrajeron más de 20 millones de toneladas de materia prima a lo largo de 200 años, utilizando técnicas y herramientas más avanzadas. Todavía se pueden ver restos de las antiguas minas romanas en los tajos abiertos de Río Tinto.

Hoy, INSERSA, el contratista responsable de todas las perforaciones y voladuras del Proyecto Riotinto de Atalaya Mining, se beneficia de tecnologías modernas que han facilitado enormemente el duro trabajo de fracturar la roca.

La mina de cobre, situada a 65 kilómetros al noroeste de Sevilla, fue clausurada en 2001 al dejar de ser rentable por la baja cotización de los metales. Atalaya volvió a poner en marcha la mina en 2015, tras dos años de rehabilitación.

La actual mina a cielo abierto comenzó su producción comercial en febrero de 2016, con un volumen inicial de procesamiento de 5 millones de toneladas al año. En junio de 2019, Atalaya finalizó la construcción de un proyecto de ampliación que prácticamente ha duplicado la capacidad de procesamiento hasta los 9,5 millones de toneladas actuales.

“La calidad de la perforación y voladura repercute directamente en el rendimiento de la planta de procesamiento”, explica. “Seguimos confiando en los equipos de Sandvik para la perforación de superficie, por sus buenos resultados. En Atalaya, estamos satisfechos con INSERSA y con las máquinas de Sandvik”.

Sandvik es proveedor de INSERSA desde hace más de una década. La flota móvil del contratista cuenta con más de 30 máquinas de Sandvik.

“La relación entre INSERSA y Sandvik destaca por la colaboración y la confianza”, observa Martín. “Sandvik entrega equipos de alta calidad y ofrece un buen servicio posventa”.

Según Laureano Pazos Pérez, jefe de producción de INSERSA, acudir a Sandvik como colaborador para el Proyecto Riotinto fue una decisión lógica.

“Una vez fijados los volúmenes de perforación mensuales, las alturas de los bancos y los diámetros de perforación, utilizamos estos parámetros para buscar proveedores de equipos fiables con plazos de entrega ajustados y un buen apoyo posventa”, dice. “El asesoramiento de Sandvik fue un elemento clave de nuestra decisión”.

Sandvik propuso la Pantera DP1500i como perforadora ideal por su fiabilidad, facilidad de mantenimiento y bajo consumo de combustible.

“La Pantera DP1500i encaja perfectamente con nuestras necesidades de perforación”, continúa Pérez. “Es fiable, robusta, fácil de manejar y fácil de mantener. La perforación es muy eficiente y alcanzamos nuestros objetivos de producción sin dificultades”.

INSERSA trabaja con 6 perforadoras Pantera DP1500i, además de una Sandvik DP900 para la rotura secundaria. Las seis máquinas Pantera, dotadas de martillos hidráulicos Sandvik GT60, perforan una media de 55.000 metros al mes. Se prevé que esa cifra irá creciendo a medida que la mina aumente su producción.

“Las características de la Pantera DP1500i que la hacían especialmente indicada para nuestra actividad son su robustez contrastada, su mecánica sin complicaciones y su fiabilidad”, explica Pérez. “Una de las opciones más importantes de la Pantera DP1500i es su moderno sistema de posicionamiento por GPS, que mejora la eficiencia y la seguridad del operador”.

Según Riopa, el sistema de navegación TIM3D potencia la confianza del operador.

“Ahora, el operador puede prescindir de tareas manuales como medir la profundidad de los barrenos, ya que las puede canalizar a través de la máquina”, dice. “El sistema mejora las voladuras, los pisos, los bancos, parámetros que exigen una máxima precisión”.

“Con un alto nivel de disponibilidad y fiabilidad, su rendimiento supera nuestras expectativas”, concluye Martín. “La Pantera DP1500i nos permite alcanzar nuestros objetivos de producción con facilidad”.